Reflexiones de un Voluntario… El Tiempo

 

Mañanas frías pese a cielos despejados, la castañera preparando su puesto en la Plaza a la vez que los primeros rayos de Sol fabrican las calles para nuestros ojos; el verano ya pasó, otoño tiñe de marrón la vegetación de los pocos Jardines de Ciudad; ello nos da a pensar… «el invierno ya está aquí, Navidad en un par de días, adiós 2017…» y es ahí cuando llenas tus pulmones de esa brisa fría y reflexionas: ¿qué he hecho con mi tiempo?

Jean de La Bruyére decía: «Los que emplean mal su tiempo son los primeros en quejarse de su brevedad» , siendo así pienso, -yo, que me acabo de quejar de que se me ha pasado rápidamente 2017… ¿empleo mal mi tiempo?- Quizás el aprovechar fielmente nuestro tiempo sería hacer única y exclusivamente lo que nos gusta, viajar por ejemplo y trabajar (en mi caso si trabajo en lo que me gusta y me ofrezco como Voluntario en lo que termina de llenarme) poco o sólo en lo que te gusta y no consideras trabajo; de alguna forma hay que ingresar dinero y poder vivir… Es ahí cuando pienso en las palabras de otro genio de la historia como Johann W. Goethe que reconocía: «Aprovechad el tiempo que vuela tan aprisa; el orden nos enseña a ganar tiempo» y me auto-convenzo de que sí disfruto de mi vida, debe ser que la llevo ordenada…

«El tiempo lo cura todo» no soy yo muy dado a esta frase, de hecho creo que nada cura sino empeora, por lo que soy más diestro en la palabra de John Fitzgerald Kennedy: «Utilicemos el tiempo como herramienta, no como vehículo» o de Publio Siro quién decía que «El tiempo de reflexión es una economía de tiempo» en el caso de hablar y actuar tras dejar tiempo para sopesar las palabras a utilizar, pero hablar y hacer por solventar, no dejarlo pasar. La vida se ve de otra forma y se duerme mejor… al fin y al cabo, «saber escoger el tiempo es ahorrar tiempo» comentaba Sir Francis Bacon.

Hablar no cuece el arroz – es un proverbio chino y Henry Ford decía: «La mayoría de las personas gastan más tiempo y energías en hablar de los problemas que en afrontarlos.» son dos de las frases o proverbios que, especialmente, se me han quedado grabados y que precisamente, veo/oigo día tras día: haré haré, hay que hacer hay que hacer, … y no se hace, cuando al final, hacer las cosas para ayer, no dejarlas para mañana, genera satisfacción y orgullo propio (y posiblemente de quienes nos rodean).

Termino con Benjamin Franklin y: «Las tres cosas más dificiles de este mundo son: guardar un secreto [os acabo de desvelar el secreto del tiempo 🙂 ] perdonar un agravio [perdono y olvido muchos/todos y se vive mejor] y aprovechar el tiempo [con esto trato de pelearme día tras día].»

Os dejo hasta la siguiente! con una frase de la cual no diré su orador, os dejo tarea a l@s curios@s!!

«Podéis pedirmelo todo, excepción hecha de mi tiempo…«

 

Reflexiones de un Voluntario…